El pasado 24 de febrero se produjo la invasión de Ucrania por parte del ejército ruso. La primera reacción de mercado fue negativa, produciéndose correcciones en la mayor parte de los índices, principalmente los europeos y los de mercados emergentes.
Llovía sobre mojado dado que el comportamiento de las bolsas, en general, no había sido bueno durante los meses de enero y febrero debido al miedo a las subidas de los tipos de interés por parte de los Bancos Centrales, con el fin de controlar la inflación en los precios.
Cómo ha afectado la invasión de Ucrania a los mercados
En un primer momento, la bolsa europea fue la más afectada como zona más cercana al conflicto. Además, el dólar sirvió como activo refugio apreciándose contra el euro. Sin embargo, los mercados que más se movieron fueron los de materias primas.
Ucrania y Rusia son dos potencias exportadoras de cereales, y los precios de éstos se dispararon ante una posible falta de suministros. También, el petróleo y el gas subieron rápidamente al anunciarse sanciones que dificultan la distribución del petróleo ruso.
La producción de petróleo de Rusia es alrededor del 10% de la producción mundial y, por tanto, afecta de manera significativa a la disponibilidad de éste. La energía será la principal cadena de transmisión de la guerra a la economía mundial, dificultando la lucha contra la inflación de los Bancos Centrales.
Cartera del fondo
La cartera del fondo GFED Aequitas se ha comportado razonablemente bien en este periodo. No teníamos exposición directa a Rusia. Los estabilizadores naturales de la cartera han actuado como esperábamos. Así, el oro y las inversiones en materias primas nos han protegido de parte de las caídas producidas en los mercados de renta variable.
También, las coberturas que teníamos en algunos mercados como el americano. Otro de los pilares de nuestro estilo de gestión es la diversificación, que también ha permitido tener una exposición reducida a algunos de los valores más afectados por el conflicto.
Situación volátil
La situación geopolítica sigue siendo volátil y tenemos poca visibilidad en cuanto a la resolución del conflicto. Los mercados se están adaptando a la nueva situación. Una vez acabado, y dependiendo de las condiciones del alto el fuego, habrá que ver qué pasa con las sanciones a Rusia y cuándo y cómo acabarían.
La situación del mercado del petróleo sigue siendo tensa en cuanto a la falta de oferta, independientemente de la falta de oferta de Rusia.
Confianza
Tenemos confianza en las inversiones de nuestra cartera por la diversificación, la calidad de las compañías, la valoración de éstas y la presencia de los estabilizadores que hemos comentado. De cara a la amenaza del alza de los precios y la inflación, las posiciones en activos reales que mantiene nuestra cartera son el mejor instrumento para los inversores que quieren proteger su patrimonio.